Su Excelencia Rev. Mons. Marcial Guzmán Saballos,  en su reflexión de las lecturas del día, subrayó “Podemos pasar momentos difíciles, podemos vivir experiencias duras, en cualquier índole de salud, económica, política, social, en cualquier realidad; pero, creer en el Dios vivo está nuestra respuesta para que podamos dar testimonio en el Señor.  Jesús les dice «-Yo soy el pan de la vida, el que viene a mí, nunca tendrá hambre y el que cree en mí, nunca tendrá se-. Y este pan es la Eucaristía, Jesús que nos alimenta, Jesús que nos da la vida verdadera. Y podemos descubrir de que Él está presente entre nosotros nos sigue fortaleciendo”, manifestó.

El Prelado sostuvo que “La iglesia nos presenta también para que vivamos como hombres nuevos, renovados, nuestra mente, fortalecido nuestro espíritu, revistiéndonos del nuevo yo, no del egoísmo sino del nuevo yo y, creando dice, San Pablo hoy,  –la imagen de Dios en la justicia, en la santidad y en la verdad-”, aseveró.

“El pueblo israelita comía el  Maná hasta saciarse, sin embargo, ahora en la persona de Jesús encontramos un alimento auténtico que es la persona viva de Jesús que escandaliza mucho, que nos va a poder decir » –Yo soy el pan bajado del cielo«; es decir, su propio cuerpo, su propia sangre que nunca se acaba. Hoy  nos acercamos al -Pan vivo bajado del cielo- que no simplemente son unas palabras para que nos queden de consuelo, Jesucristo vivo,  con su cuerpo, con su sangre, con su divinidad el que nos alimenta de verdad y el que nos da la vida eterna”, indicó.

El obispo de Juigalpa refirió que en el libro del Éxodo narra cuando el pueblo  iba  “Caminando en el desierto y llegó un momento de pensar, de protestar, de murmurar entre ellos mismos y le dijeron a Moisés “- Mira, le dice, voy a hacer y ¿para esto nos sacaste de acá, para morir acá en el desierto?, allá por lo menos como esclavos, comíamos,  con esclavitud, pero siempre teníamos algo que comer- y en este ambiente Moisés le habla a Dios y el  responde”, dijo en un breve recorrido histórico- religioso.

“Esta es la experiencia de respuesta de Dios, el pueblo que protestaba y Dios le responde, el pueblo que va a poder oír esas palabras del Señor que le dice:”-Yo te amo- y el profeta Malaquías, refiere,  va a poder cuestionar y le dice: -Demuéstrame, pues que me amas, demuéstramelo que me amas – y  Dios en su infinita misericordia nos lo está mostrando con el Mesías verdadero, con Jesucristo”.

“Jesucristo hoy nos dice y nos enseña a que creamos al Padre, a que creamos en Él, pero, para creer en Dios tenemos que acercarnos y conocerlo, tenemos que caminar con Él, es la experiencia humana y no simplemente buscarlo para saciar lo efímero de la vida”

El Prelado dijo que se va  presentando la oportunidad de “Reflexionar sobre la Eucaristía. Dice que mucha gente andaba buscando a Jesús, la gente se embarcó y fueron hasta Cafarnaún, es decir,  cruzaron y lo encontraron; pero Jesús va a darle una respuesta porque quiere la salvación de todos y las palabras  de Jesús son: «-Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto señales milagrosas sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse-«, enfatizó.

El Jerarca de Juigalpa destacó que “Jesús nos da unas recomendaciones allí:”-No trabajen por ese alimento que se acaba sino por el alimento que dura para la vida eterna y que les dará el hijo del hombre, porque éste, el Padre, Dios, lo ha marcado con su sello-; es decir, el alimento verdadero, la señal milagrosa no solamente saciarse, el domingo pasado escuchábamos cuando Jesús miró a toda la gente y les dio de comer”.

Guzmán Saballos recordó el Evangelio del domingo anterior y menciono que “ Jesús mandó a sus Discípulos y les dijo: –Vayan a recoger todo lo que ha sobrado, como señal del cuidado que no se desperdicie nada-, como señal de mantener esa presencia del Señor o de custodiar la misma fe, vayan a recoger, los Discípulos fueron y recogieron doce canastos”, dijo.

“Y hoy, Jesús nos habla fuertemente y claramente también a nosotros. ¿Cuándo buscamos al Señor?, cuando tenemos hambre, necesidad, preocupaciones, enfermedad, tanta gente que sufre y sufre desde lo más profundo, gente que ha visto  morir amigos, a padres, a esposa, a esposo, a hijos, y se ve la impotencia, por mucha tecnología que haya, por  muchos avances científicos que haya, nos muestra una actitud de impotencia, somos impotentes ante Él, y, entonces, no nos queda más que recurrir a Dios”.

“Dios Padre verdaderamente responde en circunstancias particulares, es un Padre que nos ama y la muestra de su amor es sin duda, la persona de Jesucristo que ha venido para que tengamos vida y vamos a tener vida en Él, vamos a tener vida conociéndole y creyendo en Él. Y ¿Qué significa creer en él?, que la palabra de Él se convierte en actitudes de respuesta mía, nuestras, que compartimos este don inmensurable de la fe”, manifestó Mons. Guzmán.

Obispos de Nicaragua unidos para consagrar nuestra Patria a la Virgen María

“Animamos, pues, a todos, al comenzar este mes de agosto donde tendremos la consagración a la Virgen María, el 15 de agosto todos los Obispos de Nicaragua vamos a unirnos a consagrar nuestra Patria, a consagrar nuestras Diócesis, desde ya estamos preparando para que cada hogar, cada familia pueda ir abriendo de par en par las puertas y que pueda reinar la Madre como en las bodas de Caná”, expreso el Guzmán Saballos.