Su Excelencia Mons. Jorge Solórzano Pérez, Obispo de Granada, manifestó en su homilía  de este XXIX domingo del tiempo ordinario que “Encontramos un inspirador mensaje sobre la confianza en Dios, la cual se alimenta y fortalece a través de una oración que persevera, a pesar de las condiciones cambiantes de nuestro estado de ánimo. Esta actitud de perseverancia en la oración es la que Jesús nos invita a practicar. Poco a poco, sin darnos cuenta, nos podemos ir distanciando de Dios, unas veces por cansancio, otras veces por desánimo y desesperanza”, observó.

Jesús quiere que oremos por encima de cualquier sensación de fracaso

El obispo hizo un breve recorrido basado en el texto del libro del Éxodo, que narra cuando los  israelitas van a luchar contra los amalecitas, mientras Moisés invoca la ayuda de Dios para que los resultados de la batalla le sean favorables. De esta manera,   Moisés, Aarón y Ur subieron a la cumbre del monte  a orar. -Y mientras Moisés tenía los brazos levantados vencía Israel, pero cuando los bajaba, vencía Amalec. Y como a Moisés se le cansaban los brazos, buscaron una piedra para que se sentará en ella, Aarón y Ur, uno a cada lado le sostenía los brazos, así pudo tener los brazos levantados hasta que se ocultó el sol. Y Josué derrotó al ejército de Amalec – resumió.

Mons. Solorzano,  expresó  que al analizar el significado del  cansancio de Moisés: – bajar los brazos significa disminuir el ritmo de su oración -. Podemos interpretar, entonces, el cansancio de Moisés en su oración como un símbolo del cansancio y desánimo que muchas veces afecta nuestra vida interior, con frecuencia descuidamos la participación en la misa dominical o la del Santísimo los jueves. Prescindimos del ofrecimiento de obras al comenzar el día y la acción de gracias al terminar la jornada”, ejemplificó.

“Es muy sugestiva la presencia de Aarón y Ur junto a Moisés para ayudarle a tener sus brazos en alto. -¿Qué nos dice esta escena? -Que solos no podemos, solos sucumbimos al cansancio, necesitamos el apoyo de los demás para perseverar hasta el fin. Este relato del Libro del Éxodo es un testimonio de lo que alcanza la confianza incondicional en Dios que se nutre de una oración que persevera en medio de las dificultades”

Sn Pablo motiva a Timoteo a seguir avanzando por el camino del Señor

“-Tú debes permanecer fiel a las enseñanzas que recibiste

 y a tus convicciones. Predica la Palabra de Dios -, es la mayor responsabilidad de un evangelizador, no se trata de proponer o debatir nuestras ideas particulares sobre temas diversos, sino, de facilitar que el pueblo de Dios conozca la Palabra de salvación y pueda conectarla con las situaciones de la vida diaria”, enfatizó el eclesiástico.

La segunda instrucción se refiere a la cercanía pastoral

“ –Hazte presente a tiempo y a destiempo -. Es la cercanía pastoral. Las relaciones entre el Pastor y su comunidad no pueden tener un sabor burocrático y puramente funcional. El Pastor debe compartir los gozos y esperanzas, las luchas y preocupaciones de su comunidad. El papá Francisco lo dijo en unas palabras que nunca olvidaremos:  –El Pastor debe tener olor a oveja – citando. Es el acompañamiento”, insistió el obispo.

 

La tercera: la flexibilidad que hay que tener en el trabajo pastoral

El jerarca manifestó que el trabajo pastoral “Debe estar atento a las diversas situaciones y necesidad de la gente; por lo tanto, la pedagogía pastoral debe tener en cuenta el contexto. Sobre este tema, recogió el pensamiento de San Ignacio de Loyola, quien  hablaba  –de los ajustes que hay que hacer, teniendo en cuenta personas, tiempos y lugares –. Timoteo es un inspirador modelo de evangelizador con un modo de vida absolutamente centrada en Jesucristo que se nutría de la lectura y meditación de la palabra de Dios y con una gran sensibilidad para identificar las necesidades de la Comunidad y dar una respuesta modulada pedagógicamente”, dijo .

Perseverar en la oración

Haciendo alusión a la parábola  del evangelio, sobre la importancia de perseverar en la oración para comunicar este mensaje, destacó en el relato aparecen dos personajes: un juez injusto y una viuda insistente. “La perseverancia de la viuda le permitió doblegar la insensibilidad y mala conciencia del juez. Jesús mismo explica la enseñanza de esta sencilla y expresiva parábola, cuando dice: -¿Creen que Dios no saldrá en defensa de sus escogidos cuando clamen a Él día y noche?, ¿Creen que los dejará esperando?” y nos deja dos interrogativas.

“Que esta Palabra  nos ayude a fortalecer nuestra confianza en Jesucristo, nuestro Señor y Salvador que nos dio la mayor muestra de su amor al entregar su vida por nuestra redención.  Les animo, pues, a que sigamos avanzando por un camino espiritual que persevere en la oración, a pesar del cansancio y del pesimismo que con frecuencia se apoderan de nosotros”

 

 

Fotog. Cortesía Diócesis de Granada.