Su Exc. Rev. Mons. Carlos Enrique Herrera, Obispo de la Diócesis de Jinotega, manifestó en su meditación de este domingo “Hoy nos pone la imagen de un rico y alguien que tiene un poder jefe de los publicanos y rico; pero que se ha hecho rico injustamente. El Señor lo atrae en esa curiosidad de Zaqueo, y, por eso ve Jesús aquella persona que necesita ser salvada y por eso Él mismo se invita -hoy quiero hospedarme en tu casa, Zaqueo. Este lo recibe. Este es un mensaje para los que tienen mucho, mucho dinero, para lo que tiene mucho poder, que esa riqueza no es para hacer injusticia, sino, para compartirla y, que esta respuesta de este hombre que se convierte”, dijo.
“Zaqueo responde: – Daré a los pobres la mitad de mis bienes, voy a restituir a quienes he defraudado. Ese son las acciones y actitudes de conversión”, sostuvo Mons. Herrera.
Hoy nos dice a nosotros también, en nuestra propia situación
“Ese llamado a la conversión, como dice San Pablo: -Dios también nos corrige, nos llama, porque nos ama-, nos exhorta, nos corrige, para que recordemos nuestros pecados y podamos arrepentirnos y entrar en ese camino cada día de conversión, que es un camino de todos los días, es el camino del Señor. Por lo tanto, vemos este mensaje que nos da hoy el texto del Evangelio que nos hace ver ese Dios revelado en la persona de Jesús, compasivo, misericordioso, para Él no hay, unos más que otros, todos necesitamos del perdón, claro, hay unos que se han alejado más del Señor y, Él los busca, los llama a la conversión”
Experiencia de San Pablo en Tesalónica
El prelado refirió también, la vivencia de San Pablo y la comunidad Tesalónica, en relación a – el Reino de Dios está cerca -y lo entendieron como que si ya era el final. Tal vez las palabras de San Pablo era para motivar a la conversión, que no esperáramos tiempo para la conversión, sino, que es importante pronto contestarle al Señor” instó.
“Por tanto, el fin del mundo es cuando el Señor te llame primeramente, es de estar preparado siempre, no esperar tiempo para la conversión, para tomar esa opción de Zaqueo, sino, que hay que hacerlo lo más pronto que sea posible para ganarlos la gracia, la sabiduría, la alegría y la paz que podemos conseguir en este mundo”
En la libertad de los hijos de Dios, saber cómo Él nos ama
“Porque nos ama nosotros tenemos que corresponder con amor, en esa comunión de Dios con su criatura ahí está la felicidad, en cuanto más estamos unidos a Él bajo la acción del Espíritu Santo y de su Palabra ahí vamos a encontrarlo mejor, aunque vivamos en las adversidades, en las dificultades, en los dolores, sufrimiento, ahí encontramos esa fuerza del Señor, es lo que Jesús nos enseñó, en esa vida que pasó por este mundo, unido siempre al Padre supo superar las pruebas, las tentaciones, supo superar la maldad, la injusticia”, manifestó el obispo de Jinotega.
“Estamos llamados nosotros, a hacer esa opción como Zaqueo, sin miedo, este hombre solamente en ese encuentro con Jesús, entró la salvación a su casa como dijo Jesús: -ha entrado la salvación a esta casa, a esta familia -. Hay veces el jefe de la familia le es importante su salvación para que pueda también salvar a sus hijos o a su esposa, a los demás”
Mons. Herrera invitó a retomar el mensaje tan importante que el Señor nos da este domingo “Dios es un Dios compasivo y misericordioso, un Dios que ama lo que ha creado, un Dios que ama lo que ha recreado en la persona de Jesús en nuestra era cristiana. No podemos esperar más para acercarnos más y más al Señor”, animó.
