El Obispo de la Diócesis de Juigalpa Su Exc. Rev. Marcial Guzmán Saballos, observó en su homilía de este XIX domingo del tiempo ordinario que, hoy el Evangelio nos habla de la ternura de Dios. “Jesucristo hablando con una ternura tan especial, para cada uno de nosotros, llamándonos  -rebañito mío», es decir, no temas rebañito  mío porqué tu padre ha dado el reino de los cielos, sentir amado, sentirte parte de este rebaño que no eres cualquier cosa si no eres una capacidad que Dios ha hecho para que podamos responderles adecuadamente, el Señor nos habla de la administración de la vida, de lo que vale la pena, de lo que realmente Dios nos ha regalado, saber administrar las cosas, ponerlas en su lugar, no darles el primer lugar o darle tu corazón, porque las cosas vienen y van, caduca se  acaban, todas las cosas por muy buenas que parezcan, se envejece y se oxidan,  por eso tenemos que poner nuestra mirada en el Señor, aprender a confiar en Él.

 

“Hoy también estamos gozoso porque estamos ofreciéndole a la Virgen María,  nuestra vida, nuestro caminar suscita un amor inmenso, suscita y experimentamos de que loS humanos necesitamos de ese amor, y así como ella fue llamada, elegida, y al mismo tiempo, Dios La llenó de gracias abundante, así nosotros también tenemos gracias especiales que quizás no la hemos puesto al servicio de los demás; hoy le pedimos a la Virgen María que es Madre de todos nosotros y que nosotros los chontaleños, aquí decimos, con mucha euforia, con mucha alegría que la llevamos en el corazón”

“Ojalá pues, que la llevemos en el corazón, porque dice el Señor que  -donde está tu tesoro allí está tu corazón -; que nosotros podamos escogerla que ella nos dio lo más grande que tenemos, que es su hijo el que nos salva, para que lo tengamos como el tesoro auténtico, que no caduque o que no se envejezca o que no vaya deteriorándose en nuestro caminar, al contrario, que se vaya fortaleciendo”

“Hoy la liturgia nos invita, sobre todo, a reconocer nuestra fe, la fe es un don de Dios, ya la carta a los Hebreos que hoy hemos meditado nos habla que es la forma de poseer, ya desde ahora, lo que se espera y de conocer las realidades que no se ven, por ellas fueron también alabado nuestros mayores, por la fe Abraham, por la fe Sara, Isaac; fueron tomados como hombres y mujeres capaces de responder a una realidad concreta, la fe se nos dio a nosotros por el medio del Bautismo, para que no estuviera estática ,sino al contrario, pudiera iluminar, importa  si hay vientos, doctrinas, ideas, ideologías, que superen todo el aspecto propio de la fe, y este aspecto va a saber en la capacidad de saber administrar los bienes que tenemos; pero es algo fundamental es que, saber qué bienes tenemos”

 Nosotros hemos predicado la providencia de Dios

El prelado enfatizó que “ En muchos hogares se acogen todos los días a la providencia de Dios, muchos santos han experimentado y comenzado una misión sin nada de cosas en este mundo; pero con la confianza plena en Dios, y esta de la providencia no es simplemente una acción pasiva de dejar sin las cosas que caigan del cielo, no es esa acción, sino al contrario, aprender a luchar, aprender a vivir, con una constante, pero saber dónde vamos, qué es lo que tenemos”, dijo.

En este sentido agregó que “Para eso nos hablas de unas palabras que no deben de calar en nosotros que es: este en preparados, estén listos, es decir, es que no importa el momento, las circunstancias, la experiencia que nos toque en determinado momento, sino es, poder estar siempre preparado ¿para qué?, dar razón de tu fe, dar razón de lo que crees para vivir la plenitud, en esa caminar como no hablan las lecturas de hoy”, sostuvo

“Nos hacen crecer particularmente, en la amistad con el Señor; estén preparados como lo mostraba la primera lectura de hoy del libro de la Sabiduría y nos habla de una experiencia que vivió, vivieron nuestros antepasados, que era la Pascua, la noche pascual en la que fue anunciada con anterioridad nuestros padres,  para que descubriera de que en el Dios que han conocido, el Dios que han creído, no los abandona y tampoco no se olvida de la promesa que ha hecho; ese Dios en quien realmente ha creído este pueblo, es un Dios que cumple su promesa”

Estén preparados en todo momento

“Estén atentos porque Dios se ha fijado en cada uno, por eso nos ha escogido para que podamos ser testigos de su palabra, porque Dios nos ha escogidos para que seamos testigos de su misericordia”, manifestó el eclesiástico.