El Arzobispo Metropolitano SU Emin. Reverendísima Card. Leopoldo José Brenes Solórzano, contempló en su homilía de este III domingo de Pascua la hermosura de la humildad para “Reconocer al Señor y poder cumplir la misión que encomienda a la Iglesia naciente en la persona de los apóstoles, y una misión que no va a ser tan fácil, lo vemos cómo los Apóstoles son conducidos a la cárcel, son tomados prisioneros, muchas veces son golpeados, pero ellos van adelante, y decía en la primera lectura: -Y con alegría de haber sufrido aquellos vejámenes-, y qué triste, yo creo que hoy a través de los medios de comunicación sabemos cuántos hermanos se le prohíbe anunciar al Señor, son perseguidos, son obligados a renunciar a su fe, pero qué hermoso esa personas se mantienen siempre firmes, ¿por qué?, porque el Apóstol dirá: hay que obedecer primero a Dios, antes que a los hombres, antes que a los hombres, mantenernos fiel”, citando el pasaje.
“Mantenernos fiel, es lo que tenemos que pedirle al Señor, que a pesar que tengamos presiones por todos lados, pero el Señor es el que va delante de nosotros y sobre todo, para esa fiesta tan grande que nos preparamos, Pentecostés, la venida del Espíritu Santo, ese Espíritu que mantiene la iglesia, ninguna institución humana, formada por hombres, tiene la presencia del Espíritu”, reflexionó el Jerarca.
“Hay que pedirlo para que Él les conduzca, les ilumine, pero la iglesia tiene la presencia del Espíritu y es el Espíritu que lleva adelante la Iglesia, por eso, podrá estar en un hilito, podrán muchos quererla desbaratar:-Yo estaré con ustedes todo los días hasta el fin del mundo -, así es la promesa, Cristo el Señor está ahí, encomienda a Pedro y nuevamente un -sígueme -, algo que le había dicho hace tres años: -Sígueme, y dejándolo todo lo siguieron- “
“El Señor se nos manifiesta y se nos manifiesta como gestos de amor, como aquel Padre amoroso de aquella parábola que llamaos el hijo pródigo, abre los brazos y abraza a su hijo, no le recrimina, y el Santo Padre nos dice a nosotros, sacerdotes: -Aquella persona que se acerca a confesarse, debe sentir la cercanía de Dios, y el sacerdote, el confesor, debe manifestar misericordia, no llamar a atención, no acusarlo, no recriminarle su falta”, expresó
“Jesús es rico en bondad, rico en misericordia como ya meditamos el domingo pasado, en el domingo de la misericordia; tener misericordia de la persona, de sus debilidades, de sus manchas que tengan; pero desde el corazón, no desde los labios, desde el corazón hacia la otra persona, eso es ser misericordioso, es reconocer las debilidades, mirar las debilidades; pero perdonar desde el corazón, no con bonitas palabras, no, Jesús, llama y perdona desde el corazón”
En su reflexión del Evangelio el Prelado refirió como Cristo no es un pescador, Cristo no conoce toda los secretos del mar, pero y Jesús dice a los Apóstoles: “-Lancen las redes, ¿Cuál hubiera sido la respuesta de Pedro?, tú no sabes nada, pero qué hermoso la humildad de Pedro y los apóstoles, en tu nombre echaré las redes, en tu nombre echaré las redes, y se produce la sorpresa, y se realiza la gran obra de Dios, pescar, y pescaron cantidad, que era difícil llevar las redes, y ahí un acto de fe como el de Tomás: – Señor mío y Dios mío -; un acto de fe de Juan y de Pedro, es el Maestro, lo reconocen, y se lanza Pedro va hacia Él, y va a recibir Pedro un mandato nuevo, lo hacen regresar sobre sus pies, regresar sobre a su vida”, dijo.
Mayo mes dedicado a la Virgen, mes del Rosario
“En un mes dedicado a la Virgen, mes de mayo, mes de la Virgen, mes del rosario “ Les invito a que tengamos hoy, resaltemos en nuestros hogares un altarcito en honor a la Virgen, el Papa Francisco, lo escuchaba hoy que decía: -esta imagen nos lleva a ese encuentro con Jesús-“, recordó.
Semana de oración
“Pues qué bien, que en este mes de mayo el rezo del Santo Rosario y con una intención muy especial esta semana: Señor danos sacerdotes santos. Les invito a que oremos por nuestros sacerdotes, oremos por nuestros seminaristas, tenemos 70 seminaristas en el Seminario, qué hermoso, 70 seminaristas, el próximo domingo vamos a instituir acólitos a varios de nuestros Seminaristas que están las parroquias, para prepararlos para la ordenación presbiteral a final de año posiblemente; pero sigamos orando ¿por qué?, porque – La mies es mucha y los operarios son pocos-“.
El Arzobispo invitó a los fieles a tener un momentito de orar y ofrecer un Ave María, un Padre Nuestro, para que el Señor nos conceda la gracia de tener muchachos y muchachas con orientación vocacional.
Animar las Vocaciones sacerdotales y Religiosas
El eclesiástico animó a las muchachas le pregunten al amigo, a la amiga, al amigo “ ¿No te gustaría ser sacerdote?, con esta frase esa muchachita estaría siendo promotora vocacional, porque a veces se espera una pequeña frase, el Señor espera una pequeña frase para despertar, para despertar la vocación, por eso les pido a las muchachas que me están escuchando, pregúntele a sus amigos, oye, ¿No te gustaría ser sacerdote?, en esta semana, pero también que los muchachos le preguntan a las muchachas, y a tí ¿No te gustaría ser religiosa?, instó.
“o sea que le regrese a la pregunta, si la muchacha le pregunta: ¿No te gustaría ser sacerdote?, nuestra joven del coro le pregunte a sus compañeros, los cuatro que están ahí, ¿No te gustaría ser sacerdote?, y que los muchachos le regresen la pregunta a ella, y a vos, ¿No te gustaría ser religiosa?, esa es la promoción vocacional, sin tantas palabras, y qué hermosos que también le pregunten hijo, o hija, ¿No te gustaría a tí, servir al Señor, como sacerdotes, como religiosa?.
“Les dejo tantas y tantas inquietudes, en este III domingo del tiempo pascual, en el cual el Señor nos dice: ¿Qué tienes que darme?, ¿Tienes algo qué darme?, pero en vez, de que nosotros le demos, porque cuando bajaron los apóstoles ya Él tenía un bracero con peces, Él nos da tantas, y tantas cosas más de la que nosotros podamos darle, pero ¿Qué le puedo dar yo al Señor en esta semana?”, animó EL Card. Brenes.
