“La Iglesia no es la iglesia del poder, no es… diría el Papa Francisco –la iglesia del triunfalismo -, tampoco es la iglesia de las influencias, de los privilegios. La Iglesia no es la de los tronos de este mundo, no busca sentarse a la derecha o la izquierda del poderoso, la Iglesia es Sinodal, y el Papa Francisco ha aperturado el domingo pasado un camino de Sinodalidad, que no sólo nos llevará hasta el año 2023, si no que marcará, diría para siempre, el estilo de ser Iglesia, la manera el modo de vivir y experimentar a la Iglesia”, observó en su homilía Su Exc. Rev.Mons. Rolando José Álvarez Lagos, Obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí.

En el solemne acto Eucarístico  celebrado el domingo 17 de octubre 2021,  en la  catedral San Pedro Apóstol, se dio por inaugurado la fase Diocesana del Sínodo sobre la Sinodalidad en comunión con Su Santidad el Papa Francisco, que el domingo pasado abrió el camino Sinodal para la Iglesia Universal que se desarrolla de Octubre 2021 a Octubre 2023, bajo el lema de tres verbos del Sínodo: Encontrar, escuchar, discernir, como lo citó el Pontífice.

“La Sinodalidad es caminar juntos como un sólo santo pueblo de Dios, cada uno de acuerdo a la vocación y a la misión a la que ha sido llamado, cada uno en el lugar donde se encuentra viviendo una comunidad jerárquicamente estructurada, digo jerárquicamente estructurada porque no se trata de reemplazar o de sustituir al otro en su vocación y en su misión, no se trata de eso, tampoco se trata de hacer todo por el otro en vez del otro”, enfatizó.  Mons. Álvarez Lagos.

En este sentido dijo que “Se trata de vivir real y eficazmente en comunidad, en participación, en misión y como ya -el Papa Benedicto XVI  -lo insistía mucho durante su pontificado, en la corresponsabilidad, es decir, que todos y cada uno de nosotros los aquí presentes, quienes nos acompañan a través de los medios de Comunicación Social, completamente todos, somos responsables con el otro y con los otros”, insistió el obispo.

“No sólo de la marcha de la Iglesia, no sólo de la evangelización y misión de la Iglesia que es anunciar a Jesucristo que está vivo, sino también,  llevar a este Cristo al corazón del mundo, al corazón de la sociedad, a las realidades sociales, políticas, económicas, culturales, ecológicas”

“Eso exige de nosotros una real y verdadera conversión personal y pastoral por que implica salir de nuestro confort, salir de nuestras propias seguridades y arriesgarnos a abrir todavía mayormente de par en par las puertas de nuestro corazón a Cristo, para que a como decía el Papa santo Juan XXIII  -Que podamos abrir las ventanas y las puertas de la Iglesia para que entre un aire nuevo y fresco que es el del Espíritu Santo que limpie las manchas que nosotros le hemos puesto a ella con nuestros pecados-”, rememoró el eclesiástico.

Mons. Álvarez Lagos mencionó que “El Papa ha convocado a este camino sinodal con el lema y la temática espiritual, pastoral «POR UNA IGLESIA SINODAL EN COMUNION, PARTICIPACION Y MISION» y, al hacerlo, el Papa nos está enseñando algo muy serio y muy fuerte, en la pirámide se ha invertido; anteriormente se recuerdan ustedes que en la pirámide, en la cima, en la cumbre de ella estaba el sucesor de Pedro, luego venía el Colegio Apostólico, nosotros los obispos, los sucesores de los apóstoles con los ministros consagrados, la jerarquía y después allá en la base estaban ustedes los fieles laicos”, reflexionó.

En este orden explicó que “El Papa dice:  –No es así ahora: la pirámide se ha invertido. Todos somos pueblo de Dios-. Y ahora en la cima él nos enseña que están los fieles, ustedes, luego procedemos nosotros los obispos, el Colegio Apostólico, los sucesores de los apóstoles, los ministros consagrados, la jerarquía, que somos pueblo de Dios también y en la base se encuentra el Papa”, indicó.

“Y se encuentra el Papa en la base en esta Iglesia Sinodal,  porque  el sucesor de Pedro quiere escuchar lo que el Espíritu quiere decir a la Iglesia, escuchar al pueblo de Dios”

“Pero no solo esto, sino que ahí en esta pirámide invertida hay una fundamentación teológica y catequética también muy fuerte, porque al estar el Papa abajo y debajo, recordamos la piedra que desecharon los arquitectos y que ha venido a ser la piedra angular, recordamos como Pedro es la cabeza visible sobre cuya columna descansa la Iglesia”, enfatizó el obispo.

“Esta Sinodalidad que hoy estamos aperturando en todas las Diócesis del mundo, todos los obispos del mundo, implica mucha humildad, implica de parte nuestra, de todos, humildad y servicio y, Pedro, Pedro está dándonos el ejemplo poniéndose ahí a la base, en la base como signo de servicio a todos nosotros”, recalcó.

“Humildad y servicio para que en una Iglesia Sinodal podamos escuchar, escuchar la voz de Dios a través de su Palabra, escuchar la voz del Señor en los sacramentos, escuchar la voz del Señor en los signos de los tiempos que son los eventos, las situaciones, las circunstancias históricas que vivimos en el mundo y en nuestra nación, escuchar la voz de Dios en los hermanos”

 

Camino Sinodal en la Diócesis de Matagalpa:

“Nosotros tenemos un camino largamente recorrido de más de 90 años de fundación canónica en nuestra Diócesis y desde el primer Obispo que fue marcando ciertamente con su báculo pero con sus pasos y sobre todo con su corazón, una Iglesia, una Diócesis misionera”, refirió.

“Entramos en este camino de sinodalidad con la riqueza del primer Sínodo Diocesano, convocado por nuestro queridísimo amigo, hermano Cardenal Leopoldo José, Séptimo Obispo de esta Diócesis”, refirió.

“También  contamos con la riqueza que cada uno de ellos nos ha venido dejando, modelando esta Iglesia peregrina y misionera, modelando poco a poco proféticamente, una iglesia como la quiere el Papa en salida, una Iglesia de las calles, una Iglesia de las periferias geográfica y existenciales, una Iglesia que sea hospital de campaña, una Iglesia que esté al servicio de los pobres de los mas pobres entre los pobres”.

Sínodo de la Sinodalidad: comunión, participación y misión

El Sínodo pretende escuchar a toda la Iglesia universal y por lo tanto la primera etapa que es la fase Diocesana, se extiende hasta el mes de abril 2022, los fieles desde sus Diócesis podrán dar aportes, de ahí la importancia de este proceso donde el sucesor de Pedro, el Papa, escucha a toda la Iglesia, refirió el Ordinario.

El Jerarca detalló que el 19 de diciembre en la celebración de los 97 años de fundación canónica de la Diócesis de Matagalpa “Inauguraremos con la solemnidad del Espiritu Santo el segundo Sínodo Diocesano que nos conducirá hasta el año 2024 cuando celebraremos, Dios mediante, los 100 años de fundación Diocesana”, sostuvo el Prelado.

“Que Pretende contar con la participación de los laicos del campo y la ciudad, de hecho es un laico el que va organizando el proceso, el Obispo lo va presidiendo y todos participando activamente”, animó.

Al concluir  la santa Misa hizo la oración de envío, a quienes caminaron desde la  procesión de entrada a la celebración Litúrgica, representativamente: una familia, seminaristas, una religiosa, un religioso, sacerdotes y el señor  Obispo como el Pastor que guía y apacenta al  santo Pueblo de Dios.