“Lo que está grabado en su corazón nadie ni nada se lo podrá quitar y es lo que yo quiero compartir hoy con ustedes: la imagen de la Sangre de Cristo, hoy calcinada, la recordamos nosotros hoy en esta foto. Les invito a que la tengamos en nuestro corazón”, exhortó en su homilía de este domingo con ocasión de las Fiestas dedicadas a la Sangre de Cristo, el Arzobispo Metropolitano Leopoldo José Brenes, quien insistió “Se los digo de todo corazón, grabarla en nuestro corazón que ahí nada ni nadie la podrá destruir, ni nada ni nadie nos la podrá quitar y llevarla en el corazón es producto de una fe, de una fe profunda, cuando estamos viviendo huracanes, cuando estamos viviendo turbulencia, cuando estamos viviendo confrontaciones, tanto a nivel social, a nivel político, a nivel económico, a nivel familiar, no solo nacional sino mundialmente”, advirtió.
El señor Cardenal interrogo a la feligresía “¿Dónde tienen a la imagen de la Sangre de Cristo?, ¿La tienen en un cuadro en su casa?, quizá ya polvoso, ¿La tienen en su mente o la tienen en su corazón?. ¿Dónde tenemos esta imagen de Jesús que ha querido quedarse visiblemente en esta imagen?. Yo los invito, mis buenos hijos a no guardar la imagen en un cuadro bonito, no, que esta imagen baje, pase por nuestra mente y baje y se queda en el corazón”
El Cardenal Brenes Solórzano, refirió que luego del “duro golpe a nuestra fe”, con el atentado a la Venerada Imagen de la Sangre de Cristo, igual que sucediera en Perú con El Señor de Los Milagros, ellos tuvieron la iniciativa de grabar una imagen en la pared, con esa experiencia, la Conferencia Episcopal dispuso que se pintara una imagen idéntica; sin embargo, hoy tenemos este cuadro que me lo habían regalado… se arregló y lo tenemos adornado, así que les invito a que vivamos intensamente con nuestra mirada en Jesús”
“Al celebrar este domingo nuestra fiesta, con cariño, con gusto he querido venir a presidir esta Eucaristía y compartir con ustedes este mensaje y no solamente como que les habla el Cardenal, que les habla el Arzobispo, piensen que les habla un sacerdote, que les habla el sacerdote que es hombre de fe. No le impongamos nada al Señor, no nos desesperemos”, recomendó.
Al concluir la Santa Eucaristía el señor Cardenal, mencionó que se están realizando gestiones con el Instituto Nacional de Restauración de Guatemala, mediante el Arzobispo de Guatemala Su Emi. Rev. Gonzalo de Villa y Vásquez, e Instituciones afiens, sobre la restauración de la Consagrada Imagen de la Sangre de Cristo, y que se están analizando todas las posibilidades profesionales para de restaurar esta obra
Asimismo, leyó un informe detallado sobre la contribución económica que han recibido de la feligresía, quienes con gran generosidad han dado su aporte para este fin y que se encuentra depositado en instituciones bancaria y todo de forma transparente.
